Como si hubiera otra opción. 1º Capitulo

De pronto desperté.

Aunque no fue por el dolor que atormentaba cada parte de mi cuerpo; no fue por los horrorosos recuerdis de lo que me había sucedido la noche anterior.
Me desperté por una voz preocupada que insistía en tratar de despertarme.
¿No entendía esa persona que lo único que lograba era sacarme de mi letargo haciendome sufrir los dolores de mis golpes?

Escuche que esa persona,al parecer una mujer, gritaba pidiendo ayuda. A su grito acudieron más personas, por lo que pude escuchar.
Alguien me cubrió con un abrigo y en ese momento me di cuenta que estaba desnuda.
Yna voz trató de asegurarme que todo iría bien y despues de eso no escuche más porque volvía a perder el conocimiento.



Recuperé el conocimiento.
Y lo primero que entendía fue que estaba en una habitación de paredes celeste claro, al parecer un hospital.
Una enfermera entró en la habitación y al verme despierta comenzó a hacerme preguntas, mientras revisaba los aparatos a mi alrededor y a mi misma.
Como esperaba, la primera pregunta fue la más obvia: "¿Qué sucedió?"
Y de pronto me encontré relatando como, despues de asegurarme de que mi padre no vendría, había salido a comprar algo para la cena.
Cuando pasé frente a un callejón oscuro un hombre comenzó a llamarme. Yo no le preste atención y seguí caminando, pero él igual se acercó y me tomó por la cintura. Me mareó su asqueroso olor a alcohol-el mismo olor que muy seguido tiene mi padre-El hombre me volteo a la fuerza y pude ver sus extraños ojos verdes que poseían un delicado matiz miel.
Trató de besarme y yo logré zafarme de sus brazos, pero él me volvió a agarrar y me arrastró hacia el fondo del callejón. Intentó quitarme la ropa;yo me resistí y recibí un golpe, dos tres. En algún momento perdí la consciencia, y agradesco enormemente que así sea, no podría haber vivido en paz con los recuerdos de esa noche. Luego de abusar de mi me dejó desnuda, golpeada e inconsciente en el suelo.

La enfermera tenía los ojos llenos de lágrimas. Me dijo que no me preocupara, que los golpes no me habían hecho gran daño, pero en sus facciones veía la preocupación. Y sus ojos destilaban compasión cada vez que se dirigían timidamente hacía mí.
Siempre se me dio bien darme cuenta de lo que la gente sentía por sus ojos.
Por eso, cuando mi padre entró a mi habitación del hospital aparentando estar preocupado, yo me di cuenta de que en realidad sentía algo totalmente diferente.
Exigió lo más tranquilamente posible que pudo que me dieran el alta. Aunque las enfermeras que me atendía estanban en contra, mi padre insistió de tal forma, que me tuvieron que dar el alta.
Él odiaba que no estuviera en casa para hacer de empleada doméstica, porque eso era yo para mi padre, su empleada domestica a la que se veía obligado a criar.
Me llevó al departamento en el que viviamos y antes de mandarme a mi habitación me golpeó un par de veces por ser : "Una niña estúpida, que provoca a los vagabundos y despus no se sabe defender."

No lloré, no me desesperé, ni siquiera me preocupé.
Nunca volvería a ver el hombre del callejón y ya era casi rutina que mi padre me golpeara por cualquier estupides.
El problema fue un mes despues, tenía un atrazo muy grande y me inquietaba lo sucedido en el callejón.

Hacían dos semanas que habían comenzado las clases y ese día, de regreso de la escuela, pasé por la farmacia y compré una prueva de embarazo.
Una vez en mi casa me dispuse a hacerme la prueba. Mi padre no estaba, otra vez, por lo que no no me tuve que preocupar por él. Los cinco minutos de espera fueron los más largos de mi vida. Los pensaientos me atormentaban.
"¿Que pasaría si yo estuviera embarazada, como criaría al niño, como podría salir adelante?"

Casi me dio un paro cardíaco al ver que la prueba daba positivo.
Estaba embarzada Embarazada a los 16 años, embarazada de un violador, embarazada con un padre alcoholico que seguro me mataría.

Se juntaron tantas emociones en mi interior que casi exploto. Tenía tanto miedo, preocupación, se me empañaron los ojos, pero no solo eran lagrimas de tristeza, tambien de alegría. Porque más allá de todos los problemas, era tan hermosa la perspectiva de tener un hijo. De pronto descubrí bajo el miedo y la preicupación, la alegría y la emoción.
Pero, lo que más empañaba esta idea de felicidad era la perspectiva de lo que haría mi padre. Debía ocultarselo, y así lo haría. Aunque cuando tenga un vientre de ocho meses no se lo prodré ocultar, para ese momento ya se habría ocurrido algo.

El mes siguiente fue extraño. Evitaba realizar actividades físicas, incluso en la escuela. Cada vez que olía alcohol me daban nauceas y fue dificil disimular esto último ya que mi padre es alcoholico.
Todo se complicó un día mientras me duchaba, me di cuenta de que mi vientre estaba ligeramente abultado, pronto se notaría el embarazo.
Pero que podía hacer para que mi padre no se enterará. Podría huir claro, pero a dónde, sin madre sin familia, sin amigas de confianza a las cuales acudir. ¿A dónde iría?
Y entonces un luz de esperanza se encenbdió dentro de mi y me di cuenta de que ya sabía a donde tenía que ir. Sabía que él me poyaría.

Al la mañana siguiente tomé mi mochila de la escuela y la llené con algo de ropa. Salí de la casa como todos los días para la escuela. Pero tomé un camino muy diferente. Con el poco dinero que tenía, tomé un taxi y me dirgí al otro extremo de la ciudad.
En la dirección que tenía anotada en un papel hacía tanto tiempo, decendí del taxi, y pude ver unos grandes edificios color crema que resaltaban con sus enormes ventanas espejadas.
Me acerqué al guerdia que estba en la puerta del edificio y prgunté por un nombre: Taylor Lauther.

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hola chicas!
este es el primer capitulo espero que les haya gustado...
muchas gracias andre lizbeth y lau boni por seguirme en este nuevo blog.
Espero sus comentariós, ojalá les guste mi nueva nove.

florgi